Prieto afea al PSOE su ‘no’ a la proposición para instar a las confederaciones hidrográficas a limpiar cauces
Publicado el 14 de marzo de 2024
La tromba de agua que la borrasca Juan descargó en enero sobre varias zonas de la provincia de Ávila y otras de Castilla y León “causó importantísimos daños en muchos municipios y sigue demostrando que el PSOE es el partido que ni comprende ni quiere comprender las necesidades del medio rural ni de quienes se dedican al campo”. Es la valoración de la procuradora abulense del PP, Mª Ángeles Prieto, tras comprobar cómo los socialistas votaron en contra de la PNL debatida en la Comisión de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de las Cortes regionales el pasado martes.
La propuesta instaba a la Junta de Castilla y León a que se dirija al Gobierno de España para que la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) adopte las medidas necesarias para evitar que se repitan las inundaciones acometiendo las labores de mantenimiento y limpieza de los cauces y permitiendo la participación en estas labores de los municipios. “El Grupo socialista dijo ‘no’ y demostró una vez más que solo es un satélite de Pedro Sánchez en nuestra Comunidad, incluso estoy segura de que algún procurador del PSOE no se atrevería a argumentar ese voto en contra ante alcaldes del medio rural de su propio partido”, asevera Prieto.
Como señala la procuradora del PP, “los cauces de los ríos de Castilla y León están en general sucios y abandonados, infestados de maleza, invadidos de cañas, llenos de árboles muertos”, así que “cuando el caudal crece, arrastra toda esa vegetación que tapona puentes y salidas, y se producen inundaciones”, por lo que “el resultado son desbordamientos que se llevan por delante casas, infraestructuras agrarias, caminos, hectáreas de cultivos, cabezas de ganado y, en el peor de los casos, vidas humanas”. En este sentido, denunció que la CHD “intentó salvar su responsabilidad argumentando que emitió avisos hidrológicos por situaciones de riesgo de inundación”.
Mostrando una fotografía del puente que la crecida del río Zapardiel derrumbó en Cisla, Prieto preguntó a los socialistas “qué creían que los alcaldes de Papatrigo, Viñegra de Moraña, Narros de Saldueña, Albornos, Crespos, Rivilla de Barajas, Cisla, Cantiveros, Rasueros, Flores de Ávila, Horcajo de las Torres o Madrigal de las Altas Torres podían hacer para evitar la inundación 24,12 o 4 horas antes, cuando recibieron el aviso de la llegada de esas intensas lluvias”, a lo que se contestó que “nada” antes de calificar de “sordas y ciegas” a las confederaciones hidrográficas, que “ni ven el penoso estado en que se encuentran las cuencas de los ríos ni oyen las reivindicaciones que los alcaldes hacen con respecto a la limpieza de los márgenes de estos” para “quedar como meros órganos sancionadores”.
En cuanto a las ayudas por la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de Protección Civil, Prieto señala que los municipios la esperaban “como agua de mayo”, pero que, “gracias al Gobierno central, se queda “en agua de borrajas”, puesto que solo comprometen “el 50 % del coste de reparación o reconstrucción de los daños, cuando afectan a ayuntamientos con escasa capacidad económica”.