La Comisión de Movilidad y Transformación Digital de las Cortes de Castilla y León aprobó ayer la propuesta del Grupo Parlamentario Popular, para instar al Gobierno de España la necesaria y urgente conexión, por autovía, de la ciudad de Ávila con la A-6, para conectarla directamente y sin peajes, con la ciudad de Valladolid y con el noroeste de España.

A este respecto el Grupo Popular argumenta que Ávila es la única capital autonómica que aún no dispone de esta conexión, cuando además, el volumen de tráficos de esta vía es elevado, incluso superior a otras vías del país en el las que el Gobierno de España ha realizado su conversión en autovía, y por tanto, sin costes o peajes a los usuarios. O, incluso, como también sucede, acordando el Ministerio la bonificación de peajes en autopistas que afectan a otras comunidades autónomas.

La propuesta que ha salido adelante, defiende también que se desvincule el estudio informativo licitado en el mes de diciembre de 2023 por parte del Ministerio de Transportes de Oscar Puente, en relación a las posibles alternativas que afectan a la finalización de la actual concesión de las autopistas  AP-6 (Villalba A Adanero), AP-51 (Ávila a AP-6) y AP-61 (Segovia a AP6), del proyecto de la A-40 que pretende la conexión de Ávila con Madrid), con el proyecto de la A-40 y su conexión entre Ávila y Valladolid por la A-6.

Al margen de los seis puntos en los que se concreta la Propuesta de Resolución aprobada por la Comisión de Movilidad en las Cortes, el Partido Popular defiende que mientras llega la demanda histórica de conversión en autovía de Ávila con la AP-6, el Ministerio de Oscar Puente adopte de forma prioritaria y urgente, las bonificaciones de los peajes existentes en las autopistas que discurren por Castila y León, la  AP-6, la AP-51, AP-61 y AP-71 –  al igual que lo ha hecho para otras autopistas que atraviesan o discurren por otras comunidades autónomas. Se pone de ejemplo la bonificación de la AP-9 entre Tuy y Ferrol, que fue un compromiso pactado entre los socialistas y el BNG, para que éste último apoyara  la investidura de Pedro Sánchez en 2020.

Se reclama, con todo ello, un trato igualitario para los castellanos y leoneses, como usuarios de las autopistas del Estado que discurren por la comunidad, y que realizan desplazamientos esenciales en su vida diaria, muchos de ellos, recurrentes, con Madrid, Valladolid u otras capitales de Castila y León, y de España.